Neonatología

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Cuando la mamá termina la licencia por maternidad, y debe retornar sus actividades laborales se produce un momento de incertidumbre en como proseguir con la alimentación del bebe.

La pregunta que más frecuentemente escucho es: continuar con la lactancia materna, ¿es posible?

La respuesta es sí, pero, hay que tener presente algunos concejos que nos ayudaran a transitar esta situación.

La vuelta al trabajo no sólo se considera un proceso físico, sino también mental, entonces, la mamá y el bebé se tendrán que acomodar a una situación distinta, para resolver esta situación.

Aquí van algunos consejos para organizar un plan a medida de cada madre y su familia, por ejemplo:

Unas semanas antes de volver a trabajar:

• Hay que considerar dónde quedará el niño mientras la mama trabaja (en casa con algún familiar? o con una niñera? O será mejor un jardín maternal? Si esta es la opción entonces tendremos que evaluar cómo elegirlo viendo las características de cada jardín, y también, como hacer la adaptación.
• El tener una información clara sobre los derechos laborales en lo referente al permiso por maternidad, horas para lactancia, estado de excedencia, etc. nos facilitara poder hacer compatible el trabajo con la maternidad.
• Ante la reincorporación a la vida laboral es importante considerar la extracción, conservación y almacenamiento de la leche materna para lograr la compatibilidad laboral con la lactancia materna.

Recomendaciones para continuar con la lactancia materna:

• Evaluar, si se puede, retrasar la vuelta al trabajo para cuando el bebé ya esté comiendo semisólidos o trabajar en forma parcial.
• Llevar al niño al trabajo o ir al lugar donde esté el niño para amamantarlo (si es que el bebé está próximo al trabajo).
• Aumentar las tomas cuando están juntos.
• Extracción de leche en el trabajo.
• Amamantar antes de salir a trabajar y apenas se vuelve del mismo, sin zapatos y cómoda.
• Cuando llegue dedíquese al bebé y luego relájese.
• Contar con el apoyo de la pareja, la familia, el lugar donde la va a dejar o de quien la cuida.

Siempre que sea posible es mejor darle al bebé la leche más recientemente extraída, la más fresca. Así pues, la leche que la madre se saque el lunes servirá para el martes, la del martes para el miércoles y así sucesivamente hasta el viernes. La del viernes debería congelarse al llegar a casa para que el bebé se la tome el lunes siguiente ya que no es conveniente que la leche fresca esté más de 48horas en el heladera. Durante el fin de semana el bebé es mejor que mame a demanda .Una vez que sepamos con más precisión la cantidad de leche que vamos a necesitar, si la madre se extrae leche de más, puede congelar directamente la que no se vaya a utilizar y reservarla para futuras ocasiones.

Extracción de leche

La extracción se inicia aproximadamente 2 a 4 semanas previas a la vuelta e ir guardándola en el freezer. Antes NO conviene porque la leche es un tejido vivo y tendrá menos que ver con las necesidades del bebé. Busque un lugar cómodo para hacerlo.

Lo recomendable es que pruebe las formas de extracción que tenga a su alcance, y evalúe cual le resulta más cómoda.

Tenga presente que las primeras veces es probable que obtenga poca cantidad, pero no se preocupe, usted estará estimulando e irá mejorando a medida que practique.

a. ¿Cómo hacer la extracción Manual?

Se necesita un lugar tranquilo y un tiempo de 15 a 20 minutos, además un envase limpio de plástico o vidrio. Piense en momentos felices que vivió con su bebé. Tenga fotos de él o una ropita con su aroma, éstas son cosas que favorecen el reflejo de eyección de la leche.

Siempre señalo que conviene aprender la extracción manual por si los otros sistemas fallan.

Veamos cómo es la Técnica:

• Lavado de manos.
• Masaje circular de la mama, seguido de otro desde arriba hacia la areola, estimulando suavemente la areola y los pezones para desencadenar el reflejo de eyección antes de comenzar a extraerse la leche. Tomar el envase limpio y esterilizado de plástico o vidrio.
• Colocar el pulgar por arriba y el índice por abajo en el borde externo de la areola, mantenerlos fijos y no deslizarlos sobre la piel.
• Compresión rítmica hacia las costillas con los dedos abiertos, juntándolos hacia el pezón, con la frecuencia que usaría el niño al mamar. Al principio aparecerán gotas y luego saldrá más cantidad de leche.
• Rotación de la posición de los dedos alrededor de la areola para vaciar todas las áreas.
• Alternar la mama cuando disminuya el flujo de leche (Aprox. 5-7minutos después del inicio de la salida de la leche) y repetir el masaje y el ciclo varias veces (cada ciclo es de una duración levemente menor).
• Las extracciones tienen que ser breves y frecuentes. Cada 2 o 3 horas, de seis a siete minutos de cada lado en el trabajo. Si esto lo hacemos en casa, conviene que sea, después de la mamada.

b. Técnicas mecánicas de extracción de la leche (bombas)

Extractores manuales:

• De bocina: Son los que más dañan el pecho, son difíciles de limpiar y no sirven para guardar la leche extraída. No son recomendables.
• De jeringa o cilindro: Se componen de dos cilindros de plástico que a modo de émbolo hacen vacío. Van recogiéndola leche en un recipiente inferior. Son fáciles de limpiar y a algunas madres les da buenos resultados
• De tipo pistola: Funcionan creando un vació al apretar del “gatillo”. La leche queda almacenada en un depósito inferior. Son fáciles de usar y dan buenos resultados

Extractores mini eléctricos o a pilas: Buenos resultados con las pilas recién cargadas, pero en general más caros que los anteriores. Necesitan pilas recargables por que consumen mucha energía.Considero que son fáciles de usar y limpiar.

Extractores eléctricos: Son los más eficaces y los más caros. Están indicados en casos de extracción por un tiempo prolongado, como por ejemplo bebés prematuros u hospitalizados. Algunos tienen la ventaja de poder extraer ambas mamas a la vez. Se pueden comprar o alquilar.

Transporte de la leche

Cuando estemos en el trabajo lo ideal es dejar la leche en una heladera, pero si no hubiera, puede dejarse en el bolso térmico.

Si la madre lleva leche del trabajo a la casa, es recomendable tener un bolso térmico con una bolsa con hielo o refrigerante. Dentro de ella deben colocarse los envases con la leche materna al volver al hogar. No aconsejo congelar la leche recién extraída en el trabajo, porque cuando se transporta pierde la cadena de frío y puede perder las propiedades.

También se puede contar con un segundo bolso térmico en el caso que la madre lleve a su hijo al jardín maternal para el transporte de la leche que consumirá el niño durante el día.

¿Cómo hacer el almacenamiento de la Leche?

Hay varios aspectos a tener en cuenta

• Es muy importante lavarse las manos antes de manipular la leche o extraerla.
• Usar recipientes: de vidrio, de plástico duro transparente o plástico duro oscuro. bien lavado con agua y jabón para extraer. Todos los elementos utilizados deben esterilizarse una vez al día: lavar con poco detergente y enjuagar muy bien, abriendo todas las partes.
• Como se hace la esterilización? Hay que calentar agua y cuando hierve introducir los elementos, apagar el fuego y dejar tapado durante 3 a 5 minutos. Dejar secar sobre paño limpio. Guardar tapado en la heladera.
• Recordar que si compran recipientes para recolección de orina deben ser esterilizados al vapor. No se puede usar recipientes esterilizados con óxido de etileno
• La leche que se sacó con sacaleches, pasarlo a otro envase y guardarlo en el estante superior de la heladera al fondo.
• Se puede juntar leche de distintas extracciones realizadas en el día, durante 24 hs, en el mismo envase.
• Mantener la cadena de frío por el mayor tiempo posible.
• Al final del día, se la va a congelar, se puede fraccionar en función de lo que necesite el bebé. Evitar fracciones grandes para no desperdiciar. Se sugiere que la guarde en porciones de 60 a 120 ml para poder descongelar solo lo que el niño necesita. Dejar un espacio .
• Una vez descongelada no se puede volver a congelar.
• Recuerde etiquetar los recipientes de leche con la fecha de la extracción de manera de descongelar siempre la leche más antigua.
• Una vez descongelada la leche, removerla para homogeneizarla.
• Dar al bebé, en lo posible, la leche más reciente. De un día para el otro.

¿Cómo descongelo y caliento la leche?

Lo más recomendable es descongelar la leche en forma gradual.

La noche anterior sacarla del freezer y colocarla en la heladera. Al otro día la calienta poniéndola bajo agua fría y gradualmente se la va entibiando agregando agua caliente, hasta que adquiere la temperatura ambiente. No calentar en microondas ya que destruyen componentes vivos de la leche y como la temperatura es irregular, puede parecer fría, pero quemar al niño.

Si es necesario descongelar la leche más rápidamente la primera opción exponer agua a calentar, una vez caliente, sacarla del fuego e introducir el envase de leche dentro del agua hasta que la leche alcance la temperatura deseada. Recordar que la leche materna sale a la temperatura del cuerpo, por lo que no se debe entibiar más allá de eso.

Conservación de la leche

Los tiempos de conservación más aceptables son:

• Temperatura ambiente 4 a 6 horas
• Heladera (no en la puerta, se recomienda en el estante superior) 24 a 48 horas
• Congelador 14 días
• Freezer de la heladera 3 meses.
• Freezer independiente 6meses

Preguntas Frecuentes

¿Qué cantidad de leche materna voy necesitar?
Al principio siempre es una incógnita ya que puede haber muchas diferencias de un niño a otro. Pasados los primeros días pronto conoceremos “la medida” aproximada de nuestro hijo.
Al principio hay que dejar leche de sobra y guardarla en pequeñas cantidades (60 cc).
Tenemos que calcular la hora en que la madre saldrá de casa y la hora en que volverá y estimar que el bebé hará aproximadamente una toma por cada 2,5 - 3 horas que su madre esté ausente.
Esto puede ser variable dependiendo del niño. Pero probablemente tomará entre 50 y 150 cc de leche materna por toma.
A la hora de la toma le ofrecemos un poco de leche y podemos descongelar alguna más si se queda con hambre. No desperdiciaremos tanta leche al conservarla en pequeñas cantidades.
Pronto sabremos qué cantidad de leche extraída le apetece a nuestro hijo y ya podremos ajustar mejor la que le dejamos preparada.
Es importante aclarar que, aunque algunos tomen más, la mayoría rara vez quiere más de 100 cc al principio y muchos todavía menos.

¿Fresca o congelada?
Siempre que sea posible es mejor que la leche sea fresca (recientemente extraída).

¿Se puede mezclar leche extraída en distintas ocasiones?
SI, la leche extraída se puede mezclar sin problemas ya sea para completar una toma antes de dársela al bebé o para completar una “medida” antes de congelarla.
Siempre es conveniente ir consumiendo primero la leche más antigua.
Antes de mezclar leche de varias extracciones, hay que asegurarse de que la leche esta fría o una temperatura similar con la que se va a mezclar. Se puede ir guardando en la heladera leche de varias extracciones a lo largo de un mismo día y cuando todas estén frías, unirlas para completar un recipiente de 60 cc, por ejemplo, y congelar.

¿No se me retirará la leche?
La producción de leche depende de la estimulación del pezón, a mayor demanda mayor producción, si la estimulación disminuye, la producción bajará.
Pero es posible restablecer una buena producción de leche dejando que el bebé mame a menudo todo el tiempo posible.
Aunque un sacaleches no es tan eficaz como un bebé, ayuda manteniendo el estímulo, y además el bebé sigue mamando en casa.
Antes de que baje la producción, habrá llegado el momento de introducir la alimentación complementaria.
Amamantar los fines de semana y festivos ayuda a regenerar la producción para el resto de la semana.
En cualquier caso, aunque la producción disminuya porque disminuya la demanda, bien porque la madre no se saque leche o bien porque el niño esté tomando otros alimentos, todas las madres seguirán produciendo la cantidad de leche que necesitan. Aunque un niño sólo mame una vez al día, su madre producirá leche para esa única toma.

¿Y si la leche tiene un color extraño?
La composición de la leche varía a lo largo de la toma. Al principio su aspecto es semitransparente y ligeramente Azulado pero paulatinamente la concentración de grasas aumenta y se vuelve más blanca.
Esto es completamente normal y se hace muy evidente cuando se utiliza sacaleches.
Por otra parte, cuando la madre ingiere algunos alimentos, el color de la leche puede cambiar. En la práctica no tiene mayor importancia y es una buena manera de que el niño se vaya familiarizando con distintos sabores.

¿Y si huele mal?
Algunas mujeres han comentado que su leche congelada huele a agria e incluso a rancia. Ese olor se atribuye a un cambio en la estructura de los lípidos, como consecuencia de los ciclos descongelación y descongelación en el congelador-refrigerador con eliminación automática de escarcha. Aunque puede ocurrir que ocasionalmente algún niño la rechace, por lo general no es así y tampoco resulta perjudicial para el bebé.

¿Y si no quiere comer?
La mayoría de los niños aceptan mejor otros alimentos si se los ofrecen otras personas distintas a la madre, por lo que es totalmente innecesario intentar acostumbrar al bebé a tomar papillas o leche extraída antes de que la madre vuelva a trabajar.
Algunos bebés reaccionan a la ausencia de la madre aprovechando para dormir y comiendo lo mínimo imprescindible hasta que la madre regresa, y después compensan mamando más a menudo cuando tienen a su madre a su disposición. Es normal que se despierte por las noches para mamar.

¿Cuánto tiempo necesito para que se acostumbre?
No es necesario hacer que un bebé empiece a tomar leche en biberón, vaso o alimentos sólidos semanas antes de que su madre vuelva a trabajar. Esto solamente acorta la duración de la lactancia directa. Si la persona que lo va a cuidar quiere probar con el vasito, la cuchara, etc. bastará con que lo haga 2 ó 3 días antes.